en ésta y en todas las vidas.
o al roce de la piel
sentirán que son una,
aun no exista placer.
Los ojos, al mirarse,
sentirán el fuego arder
y la sangre entre las venas
querrá brotar al amanecer.
Nuestras almas pactaron
amor eterno en esta vida
y otras más atrás,
bailando entre caricias
que nacen sin soñar.
Basta un "te quiero"
que sale del corazón
con la ilusión de un "te amo"
y palabras llenas de amor.
Mi alma clama tu nombre
cuando de ti se aparta el pensamiento,
dando nuevos bríos a mi vida,
lenando vacíos.
Mi alma y vida,
latido que embriaga esta piel
que se desvanece
al contemplarte, mi bien.
Esos ojos de miel
y la sonrisa después de saberte mío,
somos ternura, eres un caballero.
MGabriel Portilla
Tulancingo Hidalgo, México
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