Me ha tocado pasar
por mil cosas,
no sé si más o menos
que los demás,
me ha tocado callar
para no afectar a nadie,
guardar silencio
cuando mi alma gritaba.
que manchaban la moralidad
de otras personas,
me sentí amenazada
y justo ahí
me quedé pensando
dónde queda el valor moral.
Jamás sería capaz
de juzgar la vida de nadie
como me han juzgado a mí,
me han levantado falsos
y aún así sigo de pie
luchando por mis sueños,
trabajando para lograr mis metas.
No entiendo en qué momento
podría sentir envidia de alguien más,
si me enseñaron a trabajar
para no desear lo de los demás.
He trabajado duro,
nadie me ha regalado nada,
ni siquiera la confianza...;
todo me lo he ganado a pulso.
Me acepto como soy,
no necesito mi juventud que ya viví
y ahora soy lo que hay,
me amo tal cual
y a mi lado tengo la felicidad,
no envidio nada de nadie,
no tengo tiempo
para mirar lo de lo demás,
jamás le robé, ni quité
nada a nadie.
Coraje siento al saber
que una y otra vez
pueden mi nombre
pronunciar y juzgar...;
mírenme bien
no soy más de lo que ven.
No tengo miedo
de empezar de cero;
si algo me gusta de mi edad
es que ya no espero
nada de nadie,
no tengo miedo
que se marchen de mi lado
y me siento tan segura de mí
que siento la felicidad tocar.
MaGa TiCio
MÉXICO
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