Abrazada a la noche
nada más que derroche
bajo la Luna para acariciar la ilusión.
el corazón,
se apega al silencio
cruel veneno
entre el amor y el desamor,
ella es sólo un pétalo
que marchitó.
Tan fría que un témpano
parece volcán ardiente,
tan fría que se viste
de tristeza y sonríe.
Así el mundo gira
y ella sólo camina
como ráfaga de viento,
efímero sueño..., fría la razón.
Escarchando los besos
que nunca sentirá,
los labios sellados
ante el verdugo amor.
Busca sólo un abrazo
para calentar el alma entre las letras
sólo el sol abrazaría su amor.
Perdiendo cada día un suspiro,
ella en frías mantas estrelladas
el alba le cobijó...
Mgabriel Portilla MÉXICO
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