Derramé mil lágrimas envueltas
en el dulce sabor a olvido,
entre crepúsculos
de ser lo prohibido.
al más vil sentimiento,
ya era yo la mujer
de oscuras agonías.
Me vi ahí inerte,
prófuga de mil noches
llorando lágrimas de sangre
que manchaban mi alma
y este amor que hoy
se tiñe de amargura.
En medio de este Ramé
que no sé si es el caos
más bonito en mi existencia,
ni siquiera la más real advertencia
de lo maravilloso que es tu amor.
Quizás no somos
dignos del pensamiento
y este sentir que quema
y saca cada lágrima de sangre
a mi andar, clama tu amar.
Lágrimas que inundan
cada herida duele la daga,
cada palabra me mata
y ata el alma perdida.
MaGa TiCio
MÉXICO
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