donde tenemos que estar.
A veces, ni siquiera hace falta elegir,
y la vida nos muestra
cuán maravillosos somos
cuando alguien nos mira sin titubear.
Cuando miramos fijamente,
cuando hablamos y nos gana la risa,
cuando no estamos de acuerdo y nos dicen:
"No estoy de acuerdo,
pero respeto tu pensar".
Fue sencillo contigo, señor guapo,
porque siempre estás para mí,
a una llamada,
a un minuto de mí,
a una voy por ti.
Es aún más sencillo
cuando tus brazos me cubren del frío,
cuando tus labios me dicen un "te quiero" al oído.
Hoy sé que me quiero quedar,
y el tiempo ya se detuvo para poderte besar.
A veces, tenemos que tocar fondo
hasta que llega alguien o lo miras
y sabes que estuvo ahí siempre.
Volver a andar de su mano,
en las caricias que fueron sueños
y hoy son realidad.
Te espero hasta que te pueda acariciar
mi flaquito guapo.
M. Gabriel Portilla
Eres mi más bonita poesía
cuando hablamos y nos gana la risa,
cuando no estamos de acuerdo y nos dicen:
"No estoy de acuerdo,
pero respeto tu pensar".
Fue sencillo contigo, señor guapo,
porque siempre estás para mí,
a una llamada,
a un minuto de mí,
a una voy por ti.
Es aún más sencillo
cuando tus brazos me cubren del frío,
cuando tus labios me dicen un "te quiero" al oído.
Hoy sé que me quiero quedar,
y el tiempo ya se detuvo para poderte besar.
A veces, tenemos que tocar fondo
hasta que llega alguien o lo miras
y sabes que estuvo ahí siempre.
Volver a andar de su mano,
en las caricias que fueron sueños
y hoy son realidad.
Te espero hasta que te pueda acariciar
mi flaquito guapo.
M. Gabriel Portilla
Eres mi más bonita poesía
Tulancingo Hidalgo, México

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