miércoles, 14 de enero de 2015

El otro... es "otro yo"

De todos los mensajes "personales" que hemos recibido con motivo de los atentados en París en los cuales nos pedían un compromiso solidario con las víctimas de la barbarie -ya que este blog habla de VALORES y de la necesidad de vivirlos- queremos compartir las siguientes reflexiones:
PRIMERO: Esto que sucedió en París lleva ya demasiados AÑOS sucediendo a diario en Nigeria, Rep. Centroafricana, Sudán del Norte y del Sur, Egipto, Siria, Iraq, Pakistán, Indonesia, Filipinas, Corea del Norte... casi siempre a manos de los mismos. Pero eso no era noticia porque a Occidente "no le tocaba en la cara". Como dice un comentario: "¿Acaso esas otras vidas, miles y miles no valen tanto como las de estos días en la capital francesa?, máxime si se tiene en cuenta que en todos esos casos no hay ningún tipo de insulto ni provocación hacia quienes cometen esas atrocidades en nombre de su dios?".
SEGUNDO: En el mundo cristiano, en sus primeros tres siglos, se arremetía brutalmente contra todo aquél que profesara la fe en Jesucristo para al cabo de unos siglos pasar al bando perseguidor atacando a quienes no eran cristianos; era una época en la que el poder político andaba unido al poder religioso y bajo apariencia de intereses religiosos se realizaban acciones que en el fondo no tenían nada que ver con la religión sino con intereses políticos y económicos instrumentalizando a la religión "como excusa" y con la complicidad de algunos eclesiásticos que de cristianos tenían bien poco. Entonces se hacían estas barbaridades por falta de cultura y sobre todo por falta de verdadera conciencia cristiana (a los gobernantes no les interesaba que el pueblo fuera culto, fomentaban la ignorancia; hoy... no es el mismo caso porque la cultura se ha convertido en un bien universal, sin embargo...).
TERCERO: Ahora nos rasgamos las vestiduras por el daño que estos terroristas han hecho en París, pero ignoramos todo el daño secular que han hecho los gobiernos europeos en todo el planeta: América, África, Asia,... nadie se ha librado de su expolio, explotación, torturas,... muerte. No concluyó cuando se descolonizó la última nación que hoy es independiente porque a aquel colonialismo ha seguido otro aún más cruel: el que se ejerce desde mastodónticas multinacionales que explotan los recursos de naciones enteras para el beneficio de unos pocos y siempre con la complicidad de gobiernos títeres que favorecen este nuevo colonialismo e intercambio asimétrico.
CUARTO: El centro de atención debe seguir estando no en quienes han hecho o hacen mal las cosas sino en quienes actúan de buena fe pero pagan todas las consecuencias de todas las barbaries, burlas, acosos, insultos, agresiones de todo tipo (aquí no somos Charlie ni anti-Charlie)... porque todo eso es VIOLENCIA y ella nunca es aceptable venga de donde venga. Hoy hay muchos musulmanes que no están de acuerdo con esta barbarie, como tampoco lo están muchos cristianos,... sin embargo todos están sufriendo las consecuencias, los platos rotos, de tanto daño que sólo sirve para que las actitudes intolerantes de ciertas ideologías -laicistas- alimenten el falso sofisma de que "todo se arreglaría con prohibir las religiones"... como si el problema fueran ellas.
QUINTO: Invitamos a mirar a toda persona de la misma manera con que deseamos ser contemplados por los demás. Invitamos a llamar HERMANO al musulmán, budista, judío, hinduísta, al creyente y al increyente, al que nos ama y al que aparentemente nos odia o hiere (Jesús nos invita a "amar a todos, no sólo a quienes nos aman sino también a los que se hacen nuestros enemigos" (Mt.5,44) y a "perdonar SIEMPRE" (Mt.18,22)). Invitamos a un DIÁLOGO cada vez más honesto y abierto en todos los foros de la vida social, cultural y educativa en el que todos nos podamos encontrar, conocer y comprendernos. Las religiones no son malas o buenas, porque las acciones no son suyas sino nuestras. Y si no fuéramos capaces de actuar con estas actitudes... busquemos en la oración, en nuestra interioridad, la fuerza que nos ayude a practicar lo que por nosotros mismos nos sentimos incapaces.
SEXTO: Así es como lograremos ver en la diversidad, incluso en los antagonismos y los irremediables conflictos, oportunidades para el crecimiento en lugar de ver sólo problemas o dificultades. La diversidad es una oportunidad para el mutuo enriquecimiento; nadie tiene porqué obligarnos ni coaccionarnos para cambiar de religión o dejar de vivir la relación con Dios que queramos tener en las formas que elijamos, como tampoco nadie puede ni tiene autoridad ninguna para que creamos o dejemos de creer presionándonos de una manera o de otra. Es en la relación con la diversidad que nos completamos y somos más nosotros mismos.
Santi Catalán
CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO:
  • ¿Qué piensas de todo el revuelo, manifestaciones y demás que se ha producido en el mundo entero a partir del atentado terrorista que algunos islamistas radicales perpetraron contra el equipo editor de "Charlie Hebdo"?.
  • ¿Te parecen acertadas las propuestas que planteamos en los puntos QUINTO y SEXTO?, ¿por qué sí o por qué no?.
  • ¿Qué otras plantearías que pudieran servir para llegar a una sociedad más humana y humanizadora, más digna, constructiva, respetuosa y tolerante con la diversidad de personas, culturas, religiones,... aunque sigamos siendo críticos con todo aquello que atenta contra nuestra dignidad humana que es común a todos?.
  • ¿A qué te vas a comprometer hoy de manera que se lleven a la práctica esas intenciones positivas en las que estás pensando?.

1 comentario:

  1. Me parece una reflexión bastante acertada.En esa manifestación habías muchos jefes de gobierno que están practicando el terrorismo de estado,por lo que me parece una falsedad hacerse "la foto" para salir guapo.

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