Me pierdo

En tus ojos llenos de pasión,

la más ardiente tentación

entre los latidos que emana

de un sentir sin control.

Me pierdo entre las caricias

que del amor derroche

somos, cual inocentes

entrelazando nuestra piel.

Soñando y amando

entre la realidad

que nos invade, nos atrapa,

nos lleva a volar entre sábanas.

Venidos para amar,

viviendo entre amaneceres

donde el silencio es el abrazo

de este sentir, deseo y pasión.

Amaneciendo envueltos

en el alba que cobija

apenas el alma.

Mgabriel Portilla MÉXICO

Esperando por ti

¿Dónde estás amor

que de años atrás

has llegado esperando

por un nuevo amanecer?.

Esperando por ti

estoy entre esa luna y sol

que se eclipsa de amor

no sólo hoy.

Entre raíces me encuentro

esperando que de amor

mis hojas vistan el alma y

entre vientos me lleven a ti.

No hay tormento ni sueños,

no hay llanto sin dolor,

simple suspiro que arranque

este sublime amor.

Porque eres esperanza

de amor, embriagando

susurros de amor.

Mgabriel Portilla

México

Sin más

Ella se dio cuenta

que ya no valía la pena

seguir en la espera

de algo que no llegará.

Sin más decidió volar

donde los ojos le miran

cual magia que ilumina,

cual cielo en altamar.

Dejar atrás un sueño,

una realidad que se lleva

entre las estrellas y ahí

dejar de lado ese anhelo.

Sin más que un montón

de suspiros, una maleta

repleta de espera y una

bolsa llena de esperanza

se va a otro cielo.

A otros mares adonde

navegaría sin destino,

sin un lugar fijo,

sola con la esperanza

de un comienzo.

Mgabriel Portilla

México

En vuelo

Dejaré que el viento

me lleve allá

donde el silencio

grita tu nombre.

Donde las lágrimas

son secadas con tu aliento

al darme ese abrazo.

Donde los recuerdos

son la amena plática

de reír hasta no poder más.

En ese vuelo que quizás

algún día te he de alcanzar

y encontrar el consuelo

de que nunca te marcharás.

Mgabriel Portilla MÉXICO

Apostando con fe

¿Me preguntas qué haría por tener un mundo mejor?

Me paro a pensar y a mi pluma pido que dé el Do mayor.

En unos pareados plasmaré  versada mi apuesta

y mirando al cielo rogaré que acate mi propuesta.

Deja a los niños que nazcan y  crezcan en armonía,

con mucho amor, protección, respeto  y poesía.

Ata las manos del hombre que las mancha con ira

contra personas que con amor y confianza los mira.

No permitas que el poder, el dinero y la corrupción,

sean quienes aniquilen el bello mundo sin dilación.

Y si ves que alguien se siente vacío y desconsolado,

muéstrale que no es humillación, rogar arrodillado.

Pues sólo Tú Padre Celestial  con tu amor incondicional,

podrás salvarnos, dándonos a  beber de tu manantial.

Isabel  San José Mellado

Derechos de autor - España

MGP

Mañana cuando el sol

Guarde su luz y

Ante mí la noche llegue

Brindaré por el presente

Riendo a carcajadas

Intercambiando la mirada.

Entre tú y yo sólo

Luz y amor habrá.

Porque sólo existimos

Orquestando nuevas

Risas entre amaneceres

Tripulado un mar

Intentando

Llegar a donde tú estás,

Adonde el abrazo y el amor se encontrarán.

Mgabriel Portilla MÉXICO

Anclado en el olvido

Dime,  ¿por qué me enamoraste

ofreciéndome un sublime amor,

si la llave de mi alma te llevaste

devolviendo solo  tristeza y dolor?

Tengo triste y árido el corazón,

sediento muriendo va sin cariño;

habiéndote bebido con pasión,

ahora es como desvalido niño.

Y tras haberte versado en la piel,

acariciándote estoy en mi mente.

Ya no me sabe igual la dulce miel,

ni me eriza el vello un sol poniente.

Siento en el pecho doliente ardor,

punzante resaca en mis entrañas.

Sáciame con tu manantial de amor,

maquillando de sonrisa mis pestañas

Ámame, ámame, tan solo ámame,

a pleno sol, lluvia o bajo plena luna,

sin dudas, sin condiciones, ámame

y morarás eternamente en mi pluma.

Isabel San José Mellado

Entre letras

Escribo un pensamiento

que te llegue al corazón

porque eres mío sin razón.

Quiero en tu piel tatuajes teñir

para que al verles te acuerdes de mí

cual pensamiento en mí.

Nada está escrito

si de amor te habla

este sentir del alma.

Pues en su alma se plasmó

un latido que terminó

tan sólo por amor.

Vida y amor, sólo dame

un instante para hablarte

con el corazón.

Autor: M Gabriel Portilla

País: México

Ámame

Dime,  ¿por qué me enamoraste

ofreciéndome un sublime amor,

si la llave de mi alma te llevaste

devolviendo solo  tristeza y dolor?

Tengo triste y árido el corazón,

sediento muriendo va sin cariño;

habiéndote bebido con pasión,

ahora es como desvalido niño.

Y tras haberte versado en la piel,

acariciándote estoy en mi mente.

Ya no me sabe igual la dulce miel,

ni me eriza el vello un sol poniente.

Siento en el pecho doliente ardor,

punzante resaca en mis entrañas.

Sáciame con tu manantial de amor,

maquillando de sonrisa mis pestañas

Ámame, ámame, tan solo ámame,

a pleno sol, lluvia o bajo plena luna,

sin dudas, sin condiciones, ámame

y morarás eternamente en mi pluma.

Isabel San José Mellado 

Y te miré

Después de años

ella y el espejo

se encontraron.

Se miraron como hacía

mucho no se miraban,

entre miradas, tratando

de reconocerse.

Suspirando por el ayer

y se notaron unas cuantas

arrugas de más

como si aquel tiempo

fuera la eternidad.

Una sonrisa le robó

entre la mirada

que hace mucho

en algún lugar guardó.

Y te miré nuevamente,

me encantaron tus ojos

y esa sonrisa soñadora,

ese corazón que ama.

Sin duda falta mucho por reconocerte,

pero sé que está ahí

 ese ser que a nada le teme.

Te miré, te miró y te sonrió.

Mgabriel Portilla MÉXICO

Al mar arrojé...

¿Acaso mienten mis manos

cuando escriben estos versos

y en un papel en blanco

mis anhelos dejan impresos?

¿Acaso miente mi mirada   

cuando en un atardecer    

quedándose embelesada 

a mi alma hace enloquecer?

 

¿Acaso esperando por ti

he engañado a mi almohada,

contándole este triste sentir

hasta llegar la alborada?

¿Acaso miente mi corazón

cuando en esa dura espera

se sume en la desesperación

llorando una noche entera?

Nunca pienses que mentí

aunque no mostrase flaqueza,

porque esperando por ti,

al mar, arrojé…,  mi tristeza.

Isabel San José Mellado

Te extraño...

Te extraño cuando

no estás amor mío,

te extraño porque me

falta tu abrazo.

Te extraño como

como si fueras

mi mar, con esas

olas juegas.

Tal vez como el

cielo extraña a las

estrellas en una

noche fugaz.

Te extraño tanto

que el silencio se

hace presente, y

no estás.

Porque se acaba

muriendo el sol

de sed, sin su luna

de miel.

Te extraño tanto

cariño mío, tú mi

mi razón de este

amor tan lindo.

Mgabriel Portilla MÉXICO

Adicta a tu mirada

Sentada junto a la fuente de mi patio

bajo la fresca brisa que la mañana ofrece,

mojo despacito con cálido café mis labios

mientras mi adicto corazón se estremece.

Es a ti al que recuerda en ese momento,

adicto a esa mirada que su deseo alenta

a volver a sentir en mi cuello tu aliento,

calmando a mi alma su villana tormenta.

 

Adición que me causa una cruel tristeza

pues no es el café lo que moja mi boca,

sino una lágrima cayendo con sutileza

como riachuelo surcando entre la roca.

Y  junto a esa bella fuente taza en mano

tengo un amargo y triste presentimiento;

que mi adicción a tu persona será en vano

pues no percibo en ti ningún sentimiento.

Terminando mi café bajo la brisa matinal

voy desechando esa adición a tu mirada

y como un río llegando lentamente al final

se va sosegando mi pobre alma enamorada.

Isabel San José Mellado.