Una madre no es un buzón, pero puede traerte buenas nuevas,
una madre no es una caja de seguridad, pero puede guardar un secreto, una madre
no es un cofre, pero en ella puedes descubrir un tesoro.
Una madre no es una caja fuerte pero puede protegerte de los ladrones, una madre no es un arma pero puede protegerte de muchos peligros, una madre no es un semáforo pero puede evitarte muchos choques.
Una madre no es un árbol pero bajo su sombra uno se puede sentir bien cómodo.
Una madre no es una mascota pero puede hacerte unos mimos espectaculares.
Una madre no es una autopista pero te puede guiar por el mejor camino.
Una madre no es un auto pero te puede llevar a muchos lados.
Una madre no es un caramelo, pero puede endulzarte la vida.
Una madre no es un café, pero puede acompañarte mientras esperas ese resultado.
Una madre no es un té, pero te puede entibiar la vida.
Una madre no es un horno microondas, pero puede re-calentarte la comida después de esperarte hasta las 3 de la mañana.
Una madre no es una heladera, pero puede aguantarte hasta que te pudras.
Una madre no es un lavarropas, pero muchas veces te salva lavándote la ropa 5’ antes de que te la pongas...
A fin de cuentas una madre no es nada de eso, pero si me di cuenta de lo que si es:
Una madre es paciencia, entrega, sacrificio, perdón, compañía, amor, bendición, protección, cuidado y demás etc… que ocuparían muchas páginas de muchos libros, pero lo más importante de este discurso es que la madre es indefectiblemente… un regalo de Dios.
CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO:
Una madre no es una caja fuerte pero puede protegerte de los ladrones, una madre no es un arma pero puede protegerte de muchos peligros, una madre no es un semáforo pero puede evitarte muchos choques.
Una madre no es un árbol pero bajo su sombra uno se puede sentir bien cómodo.
Una madre no es una mascota pero puede hacerte unos mimos espectaculares.
Una madre no es una autopista pero te puede guiar por el mejor camino.
Una madre no es un auto pero te puede llevar a muchos lados.
Una madre no es un caramelo, pero puede endulzarte la vida.
Una madre no es un café, pero puede acompañarte mientras esperas ese resultado.
Una madre no es un té, pero te puede entibiar la vida.
Una madre no es un horno microondas, pero puede re-calentarte la comida después de esperarte hasta las 3 de la mañana.
Una madre no es una heladera, pero puede aguantarte hasta que te pudras.
Una madre no es un lavarropas, pero muchas veces te salva lavándote la ropa 5’ antes de que te la pongas...
A fin de cuentas una madre no es nada de eso, pero si me di cuenta de lo que si es:
Una madre es paciencia, entrega, sacrificio, perdón, compañía, amor, bendición, protección, cuidado y demás etc… que ocuparían muchas páginas de muchos libros, pero lo más importante de este discurso es que la madre es indefectiblemente… un regalo de Dios.
- ¿Y para ti?, ¿qué o, mejor dicho, quién es una madre?. ¿Qué valores reconoces o hallas en quien te llevó en sus entrañas y te transmitió la vida: tu madre?.
- ¿Qué valores de los expuestos en la composición anterior descubres también en ti?, ¿cuál destacarías especialmente?.
- ¿Qué dicen tus hijos de ti?, ¿coincides con sus apreciaciones?. ¿En qué crees que necesitas mejorar como madre?.
- ¿Cómo lograr esa mejoría?. ¿A qué te comprometes hoy para dar un pasito más en ese acercamiento al ideal de madre que buscas para ti y tus hijos?.
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