Un día de la nada
algo cambió en su cuerpo,
pensó: ¡no es nada!.
dejó pasar
y en su pecho
crecía el mal.
Un día decidió
dar punto final
y se enteró
que cáncer tenía ya.
Mil lágrimas y una enfrenta
con el gran DIOS
preguntando
¿por qué a mi Señor?.
Al final dijo saber
que ella era un gran ser
y entendió.
Que su grandeza
ante el mal
ella guerrera será.
Un año combatió
entre la terrible resignación
el pelo perdió.
Pero es que ella dice:
si me queda la vida
¡qué más da
lo que en el trayecto pierda!.
Gran guerrera
de lucha día a día
se excusa de no ser
quien enfrentar.
Si tan sólo ella se tocara,
no temas a tu cuerpo,
teme a la muerte que acosa,
mas sé valiente y reacciona.
Que mil personas
por ti viven y sonríen.
Mgabriel Portilla MÉXICO
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