Un grupo de científicos colocó cinco monitos en una
jaula y, en el medio de ella, una escalera con plátanos encima.
Cada vez que
uno de los monitos comenzaba a subir la escalera, un dispositivo automático
hacía llover agua helada sobre los otros monitos.
Pasado cierto tiempo, cada vez que cualquiera de los
macacos esbozaba un inicio de subir la escalera, los demás lo golpeaban (evitando así el agua helada). Obviamente,
después de un cierto tiempo, ninguno de los macacos se arriesgaba a subir la
escalera, a pesar de la tentación.
Los científicos decidieron entonces substituir uno
de los macacos. La primera cosa que el nuevo macaco hizo fue tratar de subir la
escalera. Inmediatamente, los más antiguos comenzaron a golpearlo.
Después de varias surras, el nuevo miembro de la
comunidad aprendió a nunca subir la escalera, aunque jamás supiese por qué. Un
segundo monito fue substituido y ocurrió con él lo mismo que con el primero. El
primer macaco que había sido substituido participó, juntamente con los otros,
de la golpiza.
Un tercer macaco fue cambiado y la misma golpiza fue
repetida. El cuarto y el quinto macaco fueron también cambiados, uno de cada
vez, con intervalos adecuados, repitiéndose los tratamientos a los novatos ante
sus tentativas de subir la escalera. Lo que sobró fue un grupo de cinco macacos
que, aunque nunca habían recibido una ducha fría, continuaban golpeando a
cualquier macaco que tratase de subir la escalera.
Si fuese posible conversar con los monitos y
preguntarles por qué golpeaban a los que trataban de subir la escalera...
apuesto que la respuesta sería:
“Eso es parte de nuestras costumbres, ésa es la
forma como las cosas deben ser hechas; es una tradición antigua, por eso tiene
que ser respetada.”
CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO:
- ¿En qué se fundamenta la frase escrita en rojo?, ¿tienen los actuales macacos razones objetivas para desterrar la idea de subir a la escalera a por los plátanos?.
- ¿Por qué nosotros mismos solemos hacer siempre lo mismo ante los problemas existentes en lugar de apostar por otras formas de comportarnos que puedan realmente dar solución a esos problemas?.
- ¿A quién o a qué le interesa nuestra negativa a generar respuestas innovadoras que puedan darle la vuelta a las situaciones problemáticas?.
- Piensa en esas cosas que te gustaría hacer pero todavía no emprendiste, por las razones que fuere, y proponte hacer algo nuevo, algo creativo que rompa con esa inercia pasiva. ¿Qué vas a hacer hoy en concreto al respecto?.
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