todo, ciegamente,
porque cada uno da
lo que lleva en el corazón,
en el alma.
que la intuición no miente,
mienten las personas.
Ella sigue siendo ella
y siempre confiará,
aun se sabe engañada
pasa de largo,
porque quien engaña
es quien pierde.
Ella llora y llorará mil veces
para regar el jardín de la felicidad,
florece porque siempre
la sonrisa encontrará.
A su lado va siempre
quien no sabe de cobardía,
quien valora su amor,
quien cuida de ella
y confía en su corazón.
Ella siempre será ella,
ella soy yo.
MGabriel Portilla
MÉXICO
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