martes, 1 de mayo de 2012

Quiero aprender a agradecer

Hoy, viajando en una guagua, vi una hermosa muchacha con cabello de oro, y expresión de alegría; envidié su hermosura. Al bajarse, la vi cojear... tenía sólo una pierna, y apoyada en su muleta, sonreía. Perdóname Señor cuando me quejo...
Tengo dos piernas y "El Mundo es Mío"...
Fui después a comprar unos dulces. Me atendió un muchacho encantador. Hablé con él; parecía tan contento, que aunque se me hubiera hecho tarde, no me hubiera importado, ya que al salir, oí que decía: "Gracias por charlar conmigo... es un placer hablar con gente como usted... ya ve, soy ciego"...
Perdóname Señor cuando me quejo...Yo puedo ver...y "El Mundo es Mío"...
Más tarde, caminando por la calle, vi a un pequeño de ojos azules, que miraba jugar a otros niños, sin saber qué hacer. Me acerqué y le pregunté: "¿Por qué no juegas con ellos?". Siguió mirando hacia adelante sin decir una palabra: entonces comprendí que no podía oir.
Perdóname Señor cuando me quejo...Yo puedo oir y escuchar y "El Mundo es Mío"...
Tengo piernas para ir a donde quiero. Ojos para ver los colores del amanecer y el atardecer. Oídos para escuchar las cosas que me dicen. Tengo salud...¡lo tengo todo!.
Perdóname Señor cuando me quejo...lo tengo todo... y "El Mundo es Mío"...
No le digas a Dios cuan grande es tu problema...
Dile a tu problema cuan grande es Dios.
(Anónimo)
CUESTIONES PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO:
  • ¿Por qué nos solemos fijar más en lo que nos falta que en lo que ya tenemos o somos?. Tenemos ansias de superación constantes pero... ¿qué ocurre cuando esas ansias de tener más, llegar a más,... nos amargan y dejamos de ver lo que ya conseguimos y dejamos de valorarlo?.
  • ¿Nos hace felices la ansiedad de querer siempre más y más y cuando lo tenemos agobiarnos por llegar a más?. ¿Cómo habría que contestarle a la ansiedad que experimentamos y que nos lleva a no estar nunca conformes con nosotros mismos ni con lo que tenemos ni disponemos?.
  • ¿Te valoras a ti misma por lo que ya eres y por tu capacidad de proponerte metas mejores?, ¿o más bien sólo tienes presentes tus tropezones, meteduras de pata, limitaciones o defectos?. ¿A qué te lleva una postura, o la otra?.
  • Anota cada día al menos un par de cosas que te han ayudado a ser más feliz y al final de la semana observa: ¿qué hay en común en todas esas experiencias?.
  • Ser agradecidos con lo que somos y tenemos en vez de quejarnos por lo que no tenemos ni somos es el punto de partida; ¿qué vas a hacer hoy para situarte mejor en ese punto de partida?,¿de qué puedes dar gracias hoy y aquí?. Pregúntatelo cada día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario